Thursday, November 29, 2007



















Hace unos pocos dias mi vieja me envio una carta, y le adjunto unas páginas
de cierto cuaderno, de una cierta época de mi vida. Me dijo acordate de cuando estabas triste
y para que sepas que luego se puede estar mejor.
La verdad es que no me quiero acordar, ni de lo triste, ni de lo otro.
Los recuerdos no valen nada. No voy a ser un coleccionista de momentos muertos.